Quédate

Quédate con quien le salten chispas en los ojos al mirarte, ese al que pillas mirándote embobado.

Quédate con el que siempre saque un hueco para ti, que siempre tenga ganas de más.

Quédate con quien encuentre en ti su mejor amiga, que seas esa persona con la que no le cuesta abrirse y te muestre sus miedos e inseguridades. Con quien siempre tengas tema de conversación y aún así os encante el silencio que se crea mientras os tenéis enfrente y os miráis.

Quédate con quien te vea como una verdadera diosa, que cuando tengas un día de bajón y no te guste nada de lo que ves en el espejo llegue él y te haga ver la realidad.

Quédate con el que te admira, por lo que has pasado, por tu valentía, por tu garra, por tus logros. Que esos logros se conviertan en suyos. 

Quédate donde no haya excusas, sino motivos. Donde no haya mentiras sino confianza. Quédate donde no haya dudas, sino la certeza más absoluta de que no existe nada en ese preciso instante que merezca más la pena. Ni las alegrías.

Quédate donde te hagan llorar, de risa, siempre. Quédate con quien te sientas como en casa, porque nunca es donde sino con quién.

Quédate donde todo sea mutuo, con quien siempre tengas en la punta de la lengua un te quiero, con quien sueñes con hacer miles de planes juntos, con quien te proyectes.

Quédate, no huyas, que el miedo nunca te frene cuando sepas que tienes enfrente a la persona que puede volver a poner tu vida patas arriba. Arriesga. No he conocido a nadie que se arrepienta de los momentos felices que pasó con alguien, sea cual fuera su final.


Comentarios

Entradas populares de este blog

Ojalá

El tiempo que viví contigo

Tu cura eres tú misma.